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Reducción abierta y fijación interna en fracturas de tibia y peroné

¿Qué es una reducción abierta y fijación interna en fracturas de tibia y peroné?

La cirugía de reducción abierta y fijación interna (ORIF, por sus siglas en inglés) se utiliza para estabilizar y consolidar un hueso roto. Podría ser necesaria para tratar una fractura de la espinilla (tibia) o el peroné.

La tibia, o espinilla, es el hueso más grande de la parte inferior de la pierna. Junto a este hueso, más hacia el lado exterior de la pierna, se encuentra el peroné. La tibia forma parte de la articulación de la rodilla. Los extremos de la tibia y del peroné forman parte de la articulación del tobillo.

Hay distintos tipos de lesiones que pueden dañar la tibia o el peroné y hacer que se rompan en una o más partes. Esto puede ocurrir en la parte del hueso cerca de la rodilla, cerca de la mitad más larga del hueso o en la parte del hueso cerca del tobillo (si la fractura es en esa zona, puede decirse que se quebró el tobillo). Es posible que se rompa solo uno de estos huesos, o podría tener una fractura en ambos. En algunos tipos de fractura, el hueso se rompe, pero los fragmentos óseos siguen alineados correctamente. En otros tipos de fracturas, los fragmentos óseos se salen de su posición.

Si se fractura la tibia o el peroné, podría necesitar una cirugía de reducción abierta y fijación interna para alinear los huesos y consolidarlos. Durante una reducción abierta, el traumatólogo coloca los fragmentos óseos en el lugar que les corresponde durante una cirugía. Durante una reducción cerrada, un proveedor de atención médica mueve los huesos físicamente y los coloca en su lugar sin necesidad de una cirugía.

La fijación interna es el método utilizado para volver a unir los huesos. Esto podría hacerse con tornillos, placas, varillas, alambres o clavos que el cirujano coloca dentro de los huesos para sujetarlos en su posición correcta. Así se evita que los huesos se consoliden incorrectamente. Para realizar esta cirugía, el paciente suele estar dormido con anestesia general.

¿Por qué podría necesitar una reducción abierta y fijación interna en fracturas de tibia y peroné?

Algunas afecciones aumentan la probabilidad de que ocurra una fractura de tibia o peroné. Por ejemplo, la osteoporosis aumenta las probabilidades de fractura. Otras causas comunes de lesiones que pueden producir una fractura en la tibia o el peroné son los accidentes automovilísticos o de ciclismo, los deportes de contacto, las caídas y las actividades de impacto repetitivo.

Si se fractura la tibia o el peroné, podría no necesitar una reducción abierta y fijación interna. Muchas personas no necesitan esta cirugía. Si es posible, su proveedor de atención médica tratará la fractura con otros tratamientos, como analgésicos, férulas, yesos o dispositivos ortopédicos.

La cirugía de reducción abierta y fijación interna no será necesaria a menos que la fractura no pueda consolidarse satisfactoriamente con estos otros tratamientos. Tiene más probabilidades de necesitar un procedimiento de reducción abierta y fijación interna (RAFI) en los siguientes casos:

  • Los fragmentos óseos de la pierna se han desplazado demasiado

  • La tibia o el peroné fracturado traspasaron la piel

  • Su tibia o su peroné se rompieron en varias partes

  • Su fractura es en la articulación de la rodilla o del tobillo

  • Los huesos no se consolidaron normalmente después de recibir otros tratamientos

En esos casos, la reducción abierta y fijación interna pueden volver a acomodar los huesos en la posición correcta, lo que aumenta la posibilidad de que el hueso se consolide con normalidad. Es posible que necesite una reducción abierta y fijación interna si la fractura ocurre en cualquier lugar de la tibia o del peroné. Esto incluye parte de la articulación de la rodilla o del tobillo.

¿Cuáles son los riesgos de una cirugía de reducción abierta y fijación interna para una fractura de tibia/peroné?

La mayoría de las personas que se someten a una cirugía de reducción abierta y fijación interna por una fractura de tibia o peroné evolucionan muy bien. Aunque son poco frecuentes, pueden surgir complicaciones. Las posibles complicaciones incluyen lo siguiente:

  • Infección

  • Sangrado

  • Daño en los nervios

  • Coágulos de sangre

  • Embolia grasa

  • Hueso fuera de posición o que no se consolida

  • Irritación del tejido que recubre la zona debido a los elementos de sujeción

  • Rigidez o artritis

También está el riesgo de que la fractura no se consolide correctamente y tenga que someterse a otra cirugía.

Su riesgo de tener complicaciones puede variar en función de la edad, de la anatomía de la fractura y de otras afecciones que padezca. Por ejemplo, las personas que tienen poca masa ósea o diabetes pueden tener un mayor riesgo de sufrir algunas complicaciones. Los fumadores también corren mayores riesgos. Hable con su proveedor de atención médica sobre cuáles son los riesgos que más corresponden a su caso.

¿Cómo me preparo para una reducción abierta y fijación interna para la fractura de tibia/peroné?

Este tipo de cirugía suele ser una intervención de urgencia. Antes del procedimiento, un traumatólogo preguntará acerca de sus antecedentes médicos y le hará una exploración física. Tendrá que hacerse pruebas de diagnóstico por imágenes de la tibia y del peroné, una radiografía y probablemente una tomografía computarizada. Infórmele a su cirujano sobre todos los medicamentos que toma, incluidos los medicamentos de venta libre, como la aspirina. También avísele al cirujano cuándo fue la última vez que comió.

En algunos casos, su cirujano puede hacer la cirugía de reducción abierta con fijación interna un poco más tarde. Es posible que le inmovilicen la pierna mientras espera para hacerse la cirugía. Hable con su cirujano sobre cómo prepararse para la cirugía. Pregunte si debe interrumpir la administración de algún medicamento antes de la cirugía, como anticoagulantes. No coma ni beba nada a partir de la medianoche anterior al procedimiento.

¿En qué consiste la cirugía de reducción abierta y fijación interna de la fractura de tibia/peroné?

Su cirujano podrá explicarle los detalles de su cirugía. Estos detalles dependerán de la ubicación y la gravedad de la lesión. Un cirujano ortopédico será el encargado de realizarle la cirugía con la ayuda de un equipo de proveedores de atención médica. Esta cirugía puede durar unas horas. En líneas generales, sucederá lo siguiente:

  • Recibirá anestesia general. Esto hará que permanezca dormido durante la cirugía y evitará que sienta dolor. O bien, pueden administrarle anestesia local y un medicamento para ayudarlo a relajarse.

  • Un proveedor de atención médica vigilará atentamente sus signos vitales, como su frecuencia cardíaca y su presión arterial.

  • Después de limpiar el área afectada, el cirujano le hará una incisión en la piel y el músculo de la pierna.

  • El cirujano colocará los fragmentos de la tibia o del peroné en el lugar correcto (reducción).

  • A continuación, sujetará entre sí los fragmentos fracturados de la tibia o del peroné (fijación). Para eso, usará elementos de sujeción, como tornillos, placas de metal, clavos, alambres o pernos. Si la fractura está en la parte del medio de la tibia, el cirujano suele usar una varilla metálica de gran longitud diseñada especialmente a lo largo de la parte media del hueso.

  • De ser necesario, el cirujano hará otras reparaciones.

  • Una vez que haya fijado el hueso, el cirujano cerrará las capas de piel y de músculo alrededor de la pierna.

¿Qué ocurre después de una reducción abierta y fijación interna de la fractura de tibia/peroné?

Hable con el cirujano sobre lo que sucederá después de su cirugía. Es posible que tenga mucho dolor después de la intervención, pero los analgésicos pueden ayudar a aliviarlo. Debería poder retomar su dieta habitual rápidamente. Probablemente le harán algún tipo de procedimiento de diagnóstico por imágenes, como una radiografía, para verificar que la cirugía fue exitosa. Según la gravedad de la lesión y si tiene alguna otra afección, podría irse a su casa el mismo día.

Es posible que deba mantener la pierna inmovilizada durante un tiempo después de la cirugía. A menudo, esto significa usar un soporte extraíble quizás por varias semanas. Puede que deba proteger la pierna del agua. Recibirá instrucciones sobre cómo puede mover la pierna y si puede o no cargar peso sobre la pierna.

Siga cuidadosamente todas las instrucciones de su cirujano. Es posible que tenga que tomar un medicamento para prevenir la formación de coágulos (anticoagulante) después de la cirugía. Puede que el cirujano le desaconseje el uso de determinados medicamentos de venta libre para aliviar el dolor, ya que algunos pueden afectar la consolidación del hueso. Además, su proveedor de atención médica puede indicarle una dieta con alto contenido de calcio y vitamina D mientras el hueso se consolida.

Puede que supure algo de líquido de la incisión. Eso es normal. Avise a su proveedor de atención médica de inmediato si nota que aumenta el enrojecimiento, la inflamación o la supuración en el sitio de la incisión. También debe informar a su cirujano de inmediato si tiene fiebre alta, escalofríos, dolor intenso que no mejora o pérdida de sensibilidad en la pierna o el pie.

Asegúrese de asistir a todas las visitas de control. Es posible que le quiten los puntos o las grapas aproximadamente una semana después de la cirugía.

En algún momento, tendrá que realizar fisioterapia para recobrar la fuerza y la flexibilidad de los músculos. Hacer los ejercicios tal como se lo indicaron puede aumentar sus probabilidades de recuperarse totalmente. A menudo, estas fracturas tardan muchos meses en consolidarse por completo, pero debería poder retomar muchas de sus actividades antes de que esto suceda.

Próximos pasos

Asegúrese de saber lo siguiente antes de aceptar someterse a la prueba o al procedimiento:

  • El nombre de la prueba o del procedimiento

  • Los motivos por los que se realiza la prueba o el procedimiento

  • Los resultados que puede esperar y qué significan

  • Los riesgos y los beneficios de la prueba o del procedimiento

  • Los efectos secundarios y las complicaciones posibles

  • Cuándo y dónde le realizarán la prueba o el procedimiento

  • Quién es la persona que realizará la prueba o el procedimiento y sus conocimientos o experiencia

  • Qué sucedería si no se realizara la prueba o el procedimiento

  • Las pruebas o los procedimientos alternativos disponibles

  • Cuándo y cómo obtendrá los resultados

  • A quién llamar luego de la prueba o del procedimiento en caso de tener preguntas o problemas

  • Cuánto deberá pagar por la prueba o el procedimiento

Revisor médico: Rahul Banerjee MD
Revisor médico: Raymond Turley Jr PA-C
Revisor médico: Rita Sather RN
Última revisión: 9/1/2023
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